
Con la fundación de COSCE, en 2004, las sociedades científicas españolas se adelantaron a los cambios sociales y políticos futuros constituyendo una entidad que no tenía ni sigue teniendo paragón en el continente europeo. La voluntad de recuperar un legítimo protagonismo se articulaba en dos direcciones complementarias: la necesidad de convertir a la comunidad científica en un interlocutor coherente e integrado, tanto de la propia sociedad como de los poderes públicos, y la voluntad de propiciar un espacio donde acoger y debatir ideas sobre ciencia, política científica y compromiso social. Tras diez años de su constitución, COSCE quiere examinar las principales aportaciones realizadas y proponer nuevas iniciativas que consoliden los objetivos de la Confederación con la vista puesta en el horizonte de 2020.
En concreto, el presidente Carlos Andradas, anunció la puesta en marcha del proyecto DECIDES y de un acto conmemorativo el próximo mes de noviembre. Las intervenciones principales de la Jornada, además del presidente de la COSCE, estuvieron a cargo de Aurelia Modrego, que describió el hito que supuso la acción CRECE de la que fue Secretaria General, y de Ricard Guerrero, que presentó la iniciativa FÉNIX de apoyo a las revistas de las sociedades científicas, concluyendo la actividad con la conferencia de Emilio Muñoz tras la recepción del Premio.