Los presidentes de las Reales Sociedades de Física (RSEF), Química (RSEQ) y Matemáticas (RSME) han enviado una carta al ministro de ciencia, innovación y universidades, Pedro Duque, en la que transmiten su desconcierto y malestar por su injustificada exclusión de la lista de entidades beneficiarias de las subvenciones recogidas en el Real Decreto 496/2019, que regula la concesión directa de ayudas al Instituto de España, las Reales Academias y “otras entidades”. Entre todas suman un total de 19 beneficiarios que se reparten más de 4,9 millones de euros, destinados a sufragar los gastos de organización técnica y de gestión para alcanzar diversos “fines de interés público”.

     

Las tres sociedades científicas muestran su sorpresa por haber quedado excluidas de esta relación, a pesar de que, como destacan en la carta, “cumplen todas las condiciones, tanto por sus fines como por su organización y estructura”. En particular, destacan, “nuestras sociedades, todas sin ánimo de lucro, contribuyen decididamente al desarrollo de la cultura, la educación, el conocimiento y la investigación”, tal y como recogen los estatutos de estas sociedades centenarias, en línea con los objetivos del propio Real Decreto publicado el pasado 23 de agosto.

Por el contrario, muestran su extrañeza ante el hecho de que sociedades de ámbito autonómico, algunas privadas y con un interés público de dudable importancia, se beneficien de subvenciones bajo el epígrafe de “entes de diversa naturaleza”, mientras que las tres citadas Reales Sociedades, de ámbito nacional y cuyas finalidades son específicamente las que recoge el decreto como justificadoras de subvención, no hayan sido consideradas. “Queremos pensar que ello se ha debido a una omisión no advertida”, precisan.

En la carta enviada al Ministro Pedro Duque, los presidentes de la RSEF, la RSEQ y la RSME, J. Adolfo de Azcárraga, Antonio M. Echavarren y Francisco Marcellán, respectivamente, recuerdan las numerosas actividades que las Reales Sociedades han llevado a cabo a lo largo de sus más de 100 años de historia, que abarcan desde la organización de conferencias científicas internacionales de primer nivel, a premios y reconocimientos a investigadores y docentes, tareas de divulgación científica, formación en el ámbito docente, publicaciones científicas o informes sobre problemas educativos y científicos destinados a sensibilizar a las administraciones y a la sociedad en general.

A su vez, destacan la gran trascendencia de la organización de las Olimpiadas Nacionales de Física, Química y Matemáticas que fomentan las vocaciones científicas en España, y la participación en las Olimpiadas Internacionales e Iberoamericanas, actividades todas ellas que “contribuyen a realzar el papel de la ciencia española y, también, a la imagen de nuestro país en el ámbito internacional”. Todo esto se sustenta fundamentalmente en las cuotas de sus asociados, lo que limita su capacidad de acción.

Por todo ello, los tres presidentes solicitan la inclusión de estas sociedades entre las instituciones destinatarias para potenciar el cumplimiento de los diversos fines de interés público, científico, educativo y económico. “Su inclusión en los Presupuestos Generales del Estado contribuiría, sin duda alguna, a reconocer por parte del Gobierno de España el importante trabajo que la RSEF, la RSEQ y la RSME llevan a cabo”, precisan.