El pasado 12 de mayo, Día de las Mujeres Matemáticas, veinticuatro de ellas formaron parte de una mesa redonda muy especial para visibilizar sus intereses, ilusiones, logros, aficiones, etc. Investigadoras predoctorales, posdoctorales, profesoras ayudante y contratada doctora, y profesoras titulares, tanto de universidades españolas como extranjeras, compartieron sus respuestas a doce preguntas con el objetivo de conocerlas mejor y ayudar a erradicar algunos estereotipos como el de que “las chicas no son buenas en matemáticas” o que “investigar en matemáticas es un trabajo individual”.

¿Cómo empiezas el día? ¿Alguien con quien te gustaría tomar un café? ¿Tienes algún talento oculto que te gustaría descubrir? ¿Puedes decirnos una palabra relacionada con las matemáticas que te gustaría que la gente conociese? Para conocer las respuestas, simplemente visitad la lista de reproducción del canal YouTube de la Comisión de Mujeres y Matemáticas de la RSME, que ya acumula más de 4 700 reproducciones desde el pasado 12 de mayo.

Viendo la diversidad de respuestas, esta mesa redonda ha sido una oportunidad perfecta para desmontar el tópico de que las mujeres no son buenas en matemáticas, demostrando que existe una componente muy importante de interacción social en la investigación en matemáticas, y que gran parte del éxito para ser investigadora en matemáticas es la confianza en una misma. Nuestras veinticuatro protagonistas no esquivan ninguno de los temas candentes: desde la amenaza del estereotipo al síndrome del impostor, pasando por la necesidad de visibilizar referentes cercanos en matemáticas.

Iniciativas como la anterior son una más de las que se organizan desde hace varios años con el objetivo de eliminar los estereotipos de género asociados a las profesiones CTIM (acrónimo de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) y lograr, de este modo, incrementar la tasa de mujeres formándose y trabajando en este entorno. La mayor parte de estas actividades se llevan a cabo en las aulas de los centros educativos, teniendo un especial éxito los días dedicados a visibilizar los logros de las mujeres en matemáticas (como son el 12 de mayo, el 11 de febrero, Día de las Chicas en las TIC, etc.). Pero las actividades de divulgación científica y visibilización de referentes cercanos organizadas fuera del área educativa también resultan ser herramientas muy útiles.

Recientemente, investigadores de Estados Unidos y del Reino Unido han llevado a cabo una encuesta sobre estereotipos en CTIM en entornos científicos informales como museos, zoos, acuarios, etc. Se pidió a un total de 997 estudiantes (572 niñas) de entre 5 y 18 años que contestasen si las niñas, los niños o ambos encajaban mejor en una serie de afirmaciones:

  • ¿Quién crees que suele ser mejor en ciencia/ tecnología/ingeniería/matemáticas?
  • ¿Quién crees que debería ser bueno en ciencia/ tecnología/ingeniería/matemáticas?
  • ¿Quién crees que puede ser bueno en ciencia/ tecnología/ingeniería/matemáticas?

Las conclusiones a dicha encuesta confirman que los estereotipos de género sobre la aptitud o capacidad en actividades CTIM ya aparecen en la primera etapa (de 5 a 8 años) mientras que en la adolescencia (de 12 a 18 años) tienden más a afirmar que tanto niños como niñas “deberían”, “pueden” y “son buenos” en CTIM, mostrando así un incremento en la percepción de igualdad en CTIM desde la primera infancia a la adolescencia. Por otro lado, en todos los perfiles de edad son los niños los más proclives a afirmar que su grupo “debería ser bueno” en CTIM, tendencia que no se aprecia entre las niñas. Por último, durante las visitas a estos centros, algunos de los niños y niñas interactuaron con educadores (hombres o mujeres), pero sin efecto apreciable en los resultados de las encuestas. En conclusión, el análisis presentado en el estudio confirma que la etapa de 5 a 8 años es fundamental para incidir en el desarrollo de ideas sobre quién puede y quién debe ser competente en CTIM.