La RSME y la Fundación BBVA celebraron este lunes el acto de entrega de los Premios de Matemáticas, que este año han reconocido la labor de diez matemáticos. Cabe recordar que el Premio José Luis Rubio de Francia, la mayor distinción que concede la RSME a investigadores menores de 32 años, ha sido en esta edición para Ujué Etayo, que también recibirá una ayuda de 35 000 euros de la Fundación BBVA para un proyecto de investigación de tres años. Los Premios Vicent Caselles, que conceden la RSME y la Fundación BBVA, han sido para Guillem Blanco, Ángela Capel, Elena Castilla, Damian M. Dabrowski, Daniel Eceizabarrena y Juan Carlos Felipe-Navarro. Mientras, las Medallas de la RSME, dirigidas a profesionales destacados por sus relevantes, excepcionales y continuas aportaciones al campo de las matemáticas, han reconocido en esta ocasión el trabajo de Carlos Andradas, Pilar Bayer y Luis Narváez.

“Tanto los premiados junior como los senior coinciden en una pasión personal por el conocimiento y en la convicción de que la investigación científica, además de bella y valiosa en sí misma, es extraordinariamente útil para el bienestar colectivo”, señaló el director de la Fundación BBVA, Rafael Pardo.

Un año más, la cita volvió a congregar a una numerosa representación de la comunidad matemática ante la que la presidenta de la RSME, Eva Gallardo, quiso reafirmar la misión de la RSME en la promoción del talento matemático y la excelencia, objetivo al que consideró que han contribuido premios como los Vicent Caselles “reconociendo la creatividad, la originalidad y el logro en el campo de las matemáticas de los galardonados en los primeros años de su profesión científica”.

La presidenta también repasó algunas cuestiones que afectan a la calidad de la investigación matemática y que exigen, a su juicio, un compromiso en varias dimensiones. Por un lado, la importancia del relevo generacional, en el que consideró una prioridad institucional la articulación de la carrera y las estructuras investigadoras, con una mayor incorporación de las mujeres en todos los estratos del mundo académico. Por otro lado, Eva Gallardo reivindicó la estabilidad temporal en las políticas de Investigación, Desarrollo e Innovación, “con retos bien definidos, financiación adecuada y una gestión ágil en las diferentes fases de selección tanto de personas como de proyectos”. Y apeló también a la mejora de la educación matemática, a la que se refirió como “una cuestión determinante en la sociedad actual en la que vivimos”. “Tenemos ante nosotros el gran reto de seguir avanzando en una labor que consolide a la RSME como una sociedad científica abierta al mundo, que mira con confianza al futuro y se siente orgullosa de su pasado”, aseguró.

Tras las palabras de inauguración de la presidenta se procedió a la entrega, por este orden, de las tres Medallas de las RSME, cuyos galardonados recibieron una emotiva acogida por parte de los asistentes; los Premios Vicent Caselles y el Rubio de Francia. Todos tuvieron cálidas palabras de agradecimiento tanto por el reconocimiento como hacia las personas que las han acompañado y apoyado en sus carreras, y lanzaron un mensaje prácticamente unánime sobre el valor de las matemáticas como base de la ciencia y el desarrollo, la importancia de la investigación básica y aplicada y la necesidad de una mayor financiación para desarrollarla.

Después de la clausura por parte del director de la Fundación BBVA tuvo lugar el tradicional cóctel en el que los asistentes pudieron compartir la ya tradicional celebración matemática en la que se ha convertido esta entrega de premios.