De nuevo, desde la Comisión de Educación de la RSME seguimos analizando el documento con 24 propuestas de reforma para la mejora de la profesión docente, publicado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional. Si hace unas semanas nos centramos en el acceso a la formación inicial (Boletín 746), ahora ponemos el foco en el análisis de las propuestas relacionadas con el diseño y organización de dicha formación inicial, es decir, de los Grados de Maestro/a (GdM) y el Máster Universitario en Formación del Profesorado (MUFP).

La propuesta 19 se refiere a la actualización de la relación de las especialidades docentes. Si bien este epígrafe también se vincula al acceso a la profesión, lo hemos incluido en este análisis pues su contenido puede tener un impacto importante en los planes de estudio de los GdM. Actualmente, aunque algunas facultades ofrecen un itinerario formativo como especialista en Matemáticas (o en Matemáticas y Ciencias), se trata de una vía que no conduce a una especialización real, puesto que no existe la figura del especialista en Matemáticas en el cuerpo de Maestros de Educación Primaria. Es decir, la salida natural de los estudiantes que, caso de poder escoger, cursan el GdM en el itinerario de Matemáticas es la de Maestro/a generalista. Si bien en el seno de la comisión hay escepticismo sobre el sentido con el que se hace referencia a las especialidades en el documento del Ministerio, coincidimos en la necesidad de recuperar la figura del maestro/a especialista en Matemáticas (o, al menos, en Matemáticas y Ciencias). No se entiende que haya una figura de maestro/a especialista en Música o en Educación Física y no exista la figura del especialista en Matemáticas (como tampoco en Lengua), siendo la competencia matemática (junto a la competencia en comunicación lingüística) fundamental en la etapa de Educación Primaria. Es necesario para una sólida educación matemática de nuestro alumnado de Primaria que los responsables de introducir los conocimientos básicos de Matemáticas en la etapa de Educación Primaria sean maestros/as con una formación sólida.

Tal y como están diseñados los estudios de GdM actualmente, en general, el alumnado tiende a escoger itinerarios formativos que, al acceder a la profesión, les dan más oportunidades –tal es el caso de las especialidades de Música, Educación Física o Inglés, entre otras-. Así, es indispensable exigir la figura del maestro/a especialista en Matemáticas, pero esto no es suficiente, pues los actuales itinerarios de especialidad de Ciencias y Matemáticas que se imparten en algunas facultades ofrecen una formación todavía insuficiente para ahondar en las complejidades de los conocimientos que tendrán que enseñar. Actualmente, el diseño de los GdM se ajusta a la Orden ECI del 27 de diciembre de 2007, lo que en la práctica limita la formación matemática al 6 %-9 % del total de créditos de la titulación (tal y como se explica en el Libro Blanco de las Matemáticas, p. 53). Desde la Comisión de Educación consideramos que este escaso peso de las Matemáticas en los estudios de GdM es incomprensible teniendo en cuenta la relevancia de las Matemáticas en la Educación Primaria, pues la carga lectiva de esa materia en esta etapa supone entre un 18 % y un 25 % del total (variable en función de la comunidad autónoma).

En relación a la formación de los estudiantes de los GdM, conviene también considerar la importancia de tener una plantilla consolidada de profesores que sean expertos en didáctica para poder incrementar y ofrecer una formación sólida a los futuros maestros en Matemáticas especializadas para la enseñanza. El área de la Didáctica de las Matemáticas es, a día de hoy, relativamente joven, y todavía hay pocos doctores en ella con lo que, pese al relevo generacional, el profesorado que accede a los departamentos de Didáctica de las Matemáticas y que imparte docencia en los GdM tiene a menudo una experiencia investigadora ajena a la Didáctica. Tal vez, la posibilidad de incluir créditos de Didáctica en los grados de Matemáticas fuera un estímulo para conseguir que más graduados en matemáticas se interesen por realizar un doctorado en Didáctica de las Matemáticas.

La propuesta 5 trata la revisión de la oferta del MUFP. Desde la Comisión de Educación se considera que la oferta en Matemáticas debe revisarse, porque actualmente las plazas públicas son insuficientes: la universidad no está haciendo servicio público si se permite que, como señala el propio documento con 24 propuestas del MEFP, más de la mitad de las plazas de máster (54%) las oferten universidades privadas. Además, en relación a los responsables de impartir la docencia en el MUFP, es necesario fomentar la implicación de profesores de enseñanza no universitaria en el mundo académico universitario y dar más peso a la parte de práctica. Sin embargo, respecto a este punto, que también se aborda en la propuesta 8 (Reforzar el Prácticum en el conjunto del MUFP), es controvertido que el aumento de la parte práctica suponga alargar un año más la duración del máster. En este caso el MUFP entraría en competencia con otras opciones 4+1 y, sin duda, desincentivaría el acceso a la docencia en Secundaria por parte de los graduados en Matemáticas. Por otro lado, el aumento de las prácticas debe pasar necesariamente por una profesionalización de las mismas, en las que los mentores de los centros tuvieran una formación específica en desarrollo profesional, didáctica de las matemáticas, educación matemática y ámbitos de conocimiento profesional.

Globalmente, tal y como ya se comentó en la reflexión inicial publicada hace algunas semanas, las propuestas dan lugar a un debate enriquecedor que puede contribuir a mejorar la formación inicial de los futuros docentes de educación obligatoria. Sin embargo, algunos puntos son contradictorios: las propuestas 3, 4 o 19 parecen apuntar a la importancia de incrementar una formación especializada, mientras que la propuesta 6 sugiere que hay que revisar los planes de estudios de los GdM o del MUFP para incluir habilidades transversales como las relacionadas con el desarrollo sostenible o el “marco competencial” (aunque no se específica a qué se refieren). Desde la comisión se insiste en la importancia de la especialización y en que la especialidad del MUFP sea habilitante para la especialidad a la que se oposita. En este sentido, se reitera que es fundamental abordar una revisión profunda de los diseños de los planes de estudios de los GdM para darle mayor peso a las Matemáticas, incluyendo la figura del maestro/a especialista en Matemáticas.

En resumen, desde la Comisión de Educación de la RSME se propone para el GdM que se establezca la especialidad de maestro en Matemáticas y que se incremente el número de créditos dedicados a la formación matemática especializada para la enseñanza. En el caso del MUFP, se aconseja dar más peso a la parte práctica, potenciar la formación específica de los tutores de prácticas de los centros educativos y que la especialidad de la formación inicial sea habilitante para la especialidad a la que se oposita.